Lumapit Sa Akin, Paraiso (Ven a mí, Paraíso)
por Stephanie Comilang
Filipinas / Canadá, 2017
sinopsis
Lumapit Sa Akin, Paraíso (Ven a mí, paraíso) es un documental de ciencia ficción que tiene como telón de fondo Hong Kong y las diversas formas en que la trabajadora inmigrante filipina ocupa Central los domingos. La película está narrada desde la perspectiva de Paraíso, un fantasma interpretado por un dron que habla del aislamiento que supone ser desarraigado y arrojado a un nuevo lugar. El alivio de Paraíso llega cuando por fin es capaz de interactuar con las mujeres y sentir su propósito, que es transmitir sus vlogs, fotos y mensajes de vuelta a casa. Durante la semana se ve obligada a volver al aislamiento y se encuentra en un atolladero existencial.
Los domingos, Central se convierte en un lugar fundamental para Paraíso y las tres protagonistas, ya que miles de personas se congregan para crear un espacio de cuidado femenino, lejos de las casas de sus empleadores, donde viven y trabajan a tiempo completo. Desde primera hora de la mañana hasta la noche, las mujeres ocupan estos espacios normalmente utilizados para las finanzas y la banca y los convierten en espacios donde se relajan con comida, bebida, manicura, oración y baile. Sólo cuando las mujeres se reúnen en masa la señal es lo bastante fuerte como para convocar a Paraíso para que las descargue.
Lumapit Sa Akin, Paraíso utiliza las distópicas estructuras laberínticas de Hong Kong que las emigrantes filipinas reimaginan y se centra en la belleza de la prestación de cuidados, pero también explora cómo la tecnología se utiliza como un medio fundamental para que las mujeres se conecten, entre sí pero también con sus seres queridos. Planteando cuestiones sobre el aislamiento moderno, la migración económica y el papel del espacio público tanto urbano como digital, la película trasciende sus diversos componentes para ofrecer un sorprendente comentario sobre el presente, desde el punto de vista del futuro.
sobre el director
Stephanie Comilang es una artista que vive y trabaja en Berlín. Sus obras, basadas en documentales, crean narrativas que analizan cómo nuestra comprensión de la movilidad, el capital y el trabajo a escala mundial se ve determinada por diversos factores culturales y sociales. Su obra se ha expuesto en la Tate Modern, el Museo Thyssen Bornemisza, Hamburger Bahnhof, Tai Kwun, Julia Stoschek Collection y Haus der Kunst. Ha sido galardonada con el Sobey Art Award 2019, el premio de arte más prestigioso de Canadá para artistas de 40 años o menos.